Hay calles en Madrid que parecen diseñadas para pasear sin rumbo, y la del Conde de Xiquena es una de ellas. Entre fachadas señoriales y escaparates cuidados, de pronto te topas con un pedazo de México: Taquería La Lupita. No es un local que grite para llamar la atención; más bien te invita con un guiño, con ese olor a maíz y especias que se escapa por la puerta y te hace girar la cabeza.
Dentro, el ambiente es cálido y algo bullicioso, como debe ser un sitio donde la gente viene a comer y a quedarse un rato. La decoración mezcla lo tradicional y lo moderno: madera oscura, toques de color, y una barra que parece pensada tanto para pedir un margarita como para charlar con el camarero sobre qué taco elegir. No es un restaurante solemne, sino un lugar vivo, con mesas que se llenan de grupos de amigos, parejas y algún que otro solitario que se deja llevar por la carta.
La carta y sus pequeños rituales
Aquí los tacos no son un mero relleno en una tortilla: son pequeñas piezas de artesanía culinaria. Entre los más celebrados están el Gobernador y el de atún en mantequilla, que aparecen una y otra vez en las recomendaciones de quienes han pasado por allí. También hay quien defiende con pasión la quesadilla o los tacos de alambre. El precio ronda los 8-11 € la pareja de tacos, lo que para algunos es razonable y para otros un capricho que se justifica por la calidad y el ambiente. El ritual ideal, según los habituales, empieza con unas margaritas —hay quien sueña con las frozen—, sigue con un par de tacos bien escogidos y termina con un pan de elote de postre, quizá acompañado de un mezcal. No es un sitio para comer de forma apresurada: la experiencia se disfruta mejor con tiempo y compañía.
El servicio y el ambiente
Uno de los puntos más repetidos en las opiniones es la amabilidad del personal. Camareras que sugieren, explican y recomiendan sin prisas, y que parecen disfrutar de lo que hacen. El servicio es rápido, pero no te empuja a irte; puedes quedarte un rato más con tu copa y seguir la conversación.El ambiente cambia según la hora: a mediodía es más relajado, casi íntimo; por la noche, especialmente los fines de semana, se convierte en un punto de encuentro previo a salir de fiesta. No es raro ver mesas con más margaritas que platos, y risas que se mezclan con la música de fondo.
Web: http://lalupita.es/
Teléfono: 911526565
Dirección: C. del Conde de Xiquena, 10, Centro, 28004 Madrid