Imagina cruzar el umbral de una tienda diminuta en la calle del Barquillo nº 7 — solo 33–36 m², con techo alto — y quedarte asombrado por vitrinas repletas de coches en miniatura. Eso es Macchinine, un auténtico santuario para coleccionistas y amantes de los automóviles pequeños, donde el silencio se rompe solo por el tintinear de los metales y el brillo de los escaparates. Al mando está José María Sánchez, ingeniero de Caminos reconvertido (sin duda, para alegría de muchos) en devoto de los coches en miniatura. Lo que empezó como usuario habitual se transformó hace unos años en propietario de este templo minúsculo, heredado cuando vio la oportunidad de seguir con el legado. Su colección personal suma más de 5.000 piezas, y desde 2017 dirige el negocio con pasión intacta.
Dentro encontrarás hasta 13 000 coches a escala, desde clásicos y reliquias hasta novedades recientes. Marcas como Scalextric, Matchbox, Dinky, Corgi (y muchas otras) se alternan en vidrieras ordenadas por escala, época y fabricante. Todo ello convierte a Macchinine en una tienda con historia, pero también en un catálogo viviente del coleccionismo automovilístico.
En Macchinine no solo se compra: se personaliza, se repara y se busca cualquier modelo que no esté en stock. ¿Tienes una foto de ese coche que marcó tu infancia? Llévasela y ellos intentarán conseguirlo, o incluso lo pintan y le ponen matrícula. También tienen lista de espera para esos detalles que hacen cada pieza única. Los precios son tan variados como su catálogo: desde modelos por unos 10 €, hasta piezas excepcionales valoradas en varios miles. Ferraris en escala 1:18 por unos 600 € o coches de 1:8 — auténticas miniaturas gigantes— son algunos de los tesoros que encontrarás.
Dirección: Calle del Barquillo, 7, 28004 Madrid (barrio Chueca) EsMadrid
Horario: Lunes a sábado: aproximadamente de 10:00 a 13:45 y de 14:45 (o 16:30) a 20:30. Domingos cerrado.
Contacto: 917 01 05 18